Este jueves nos toca recordar la nota de la Revista ExaFútbol edición impresa publicada en el año 2017 en la que Jorge Luis Campos Velázquez, alias “Campitos”, dos veces mundialista con la Selección Paraguaya, confesó la ‘cábala’ de su equipo del Exa Santa Clara, Inglaterra 89.
Tal vez el gol más importante de la carrera de Campitos fue aquel que le marcó a Brasil el 18 de julio de 2000, en Asunción, por las eliminatorias para el Mundial de 2002; tanto que selló la primera victoria paraguaya sobre la ‘verdeamarelha’ en una competición premundialista.
46 partidos internacionales y 6 goles vistiendo la casaca de la Albirroja le han dejado una gran experiencia, la que comparte con el Exa Santa Clara. Y sí que le han sabido quitar provecho, ya que el Exa se adjudicó en el 2016 los dos torneos interexas: la Exachampions y la ExasCup.
Un pase costoso
Campitos recordó que su traspaso del fútbol profesional al Inglaterra 89 del Exa se dio cuando “tome la decisión de no jugar más a nivel profesional y como siempre estaba en contacto con mis excompañeros, empecé a disputar el torneo del Exa”.
A la hora de competir contra los más jóvenes, “pareciera que ellos van en moto y nosotros en bicicleta (risas)”, afirmó Campitos. Pero no solo la velocidad juega en la cancha, sino “un cúmulo de cosas como ‘la maña’ que es importante”, aseguró el exmundialista.
¡17 finales disputadas!
Inglaterra es la fusión de las Promociones 88 y 89, al que fueron sumando refuerzos de otras Promos a lo largo de los años. “Me acople al equipo y formamos un buen grupo que es muy unido”, dijo el ahora entrenador.
“Gracias a Dios ganamos muchos campeonatos; aunque fueron más las finales perdidas”, amplió Jorge Campos, sobre este equipo que es de armas tomar ya que en su palmarés ostenta nada más y nada menos que 8 campeonatos y 9 subcampeonatos tras 17 finales disputadas.
La cábala
En el fútbol hay cábalas y el equipo de Inglaterra 89 también tiene la suya: “Generalmente la esposas no se suelen ir nuestros partidos. Una vez les llevamos a una final y perdimos. Desde entonces por cábala nunca más llevamos a las esposas. No está prohibido, solo que a las finales no van más (risas)”.
Para cerrar, una palabra de autoridad dejó esta gran afirmación: “Es lo mismo ser profesional o amateur, al jugar una final se tiene la misma sensación en ambos casos. El objetivo es siempre el mismo, ganar como sea”.
